Al encuentro de la Juventud.

Siempre se dice que donde está la lucha está la Juventud Comunista, sí, sin dudas ahí estamos. Pero no solo. Sonará redundante, pero la Juventud Comunista está ahí donde está la juventud uruguaya, porque de ella somos parte. Somos parte en lo más abstracto, que pueden ser los sueños de vida que todas tenemos, las inquietudes e incertidumbres que nos preocupan de nuestro futuro, esas frustraciones con las que nos chocamos cotidianamente, y la esperanza ahí latente que nos hace seguir para adelante y no rendirnos. Pero también somos parte de la juventud uruguaya en lo más concreto de la realidad, en nuestras rutinas de trabajo y estudio, en la salida a tomar mate a la rambla o a una plaza, en la ida a la cancha el fin de semana, en la salida a un festi o las noches de carnaval. Nuestras vidas son las mismas que las de todos los jóvenes uruguayos.

Por eso, en vísperas de celebrar nuestro 70 aniversario, planificamos actividades que reflejan esto, allí donde estamos salimos al encuentro de la juventud toda. Tenemos una invitación para transformar la esperanza en realidad, esa esperanza en la que depositamos nuestros sueños de alegría, de un Uruguay en el que esté bueno vivir.

Empezamos una nueva etapa en el camino junto a las artes y el deporte. Somos parte de esas expresiones de nuestra multiculturalidad, característica de nuestra identidad. Todas esas señas que nos unen, que fortalecen lo colectivo, y son también otros campos de lucha.

Desde una actividad de candombe, expresión heredada de los esclavos que conformaron nuestra patria. Mantener viva la cultura de quienes fueron parte de la construcción de nuestra libertad e independencia, arrancados por la fuerza de sus tierras y llevados al otro lado del mundo. Entender la raíz de una expresión cultural, para reivindicar su historia, que es la historia de nuestro pueblo, para reivindicar el carácter antiimperialista y anticolonial que tiene no olvidar la cultura y las tradiciones de los esclavos, no olvidar que si decimos que la población uruguaya viene de los barcos no significa sólo aquellos que traían blancos europeos a la conquista de nuestras tierras, sino los barcos de esclavos que fueron parte esencial de las raíces de nuestra historia.

Si hablamos de la identidad del pueblo uruguayo no puede faltar una actividad vinculada al fútbol, deporte que despierta pasiones y amores, el deporte del pueblo.

Frente a un deporte que desvela a gran parte de nuestra población nuestra postura debe alejarse del snobismo, no entender lo que significa los colores de una camiseta en la mayoría de nuestra gente es no entender lo que mueve a nuestra gente.

Como todo en este mundo capitalista, los intereses de los privados quedan muchas veces por encima del disfrute de la gente. Aquello que era de todos, aquello que une a la gente, se transforma para el beneficio económico de algunos pocos. Sobrados ejemplos hay de las posibilidades de transformación cultural que se pueden dar a través del deporte, especialmente del fútbol en este caso. El fútbol como lugar de encuentro y fortalecimiento de lo colectivo.

Tenemos invitación también para varietés, porque el ocio es un derecho, porque encontrarnos a través de la música, de los juegos, en un lugar que no pretende nada más que romper el aislamiento y compartir la diversión es necesario.

Haremos también actividades vinculadas al rap y el freestyle, porque las plazas están llenas de pibes que a través de un movimiento contracultural generan lazos de comunidad, solidaridad y se apropian de los espacios públicos, para disfrute de la juventud. Lejos de prejuicios y estereotipos, encontrando a través de la música una forma de contar su realidad, y también transformarla, comprometidos con el compañero que tienen al lado.

Por supuesto, atravesando todas instancias con movidas solidarias, con la perspectiva de hacer un cambio hoy, de transformar la vida de nuestros compatriotas, pasando a la acción, y sumando a cada vez más jóvenes de todos lados. Siempre teniendo presente de dónde venimos.

Mantener viva la memoria de quienes lucharon y abrieron camino es una tarea diaria, es algo que hacemos cuando hablamos, pero también desde las acciones. Mantener viva la memoria de todos aquellos y aquellas que construyeron a esta Juventud, y también de todos aquellos y aquellas que sin estar en nuestras filas, lucharon siempre codo a codo. Las actividades de memoria, en cada espacio en el que estamos, es también conocer nuestro pasado para saber qué épocas no queremos que vuelvan, y defender la democracia que tanto nos costó recuperar.

Defendemos la construcción de una democracia de derechos, de oportunidades para todas y todas, con un Estado presente y priorizando a los más postergados. Necesitamos recuperar rápidamente los derechos perdidos en el último gobierno, y necesitamos un presupuesto que se enfoque en reducir la desigualdad, y en mejorar los sectores más importantes. Vamos a luchar para que la educación reciba un presupuesto digno.

La invitación está hecha, a sumarte desde cada espacio pero bajo las mismas banderas, las de transformar la realidad con solidaridad, y en colectivo, a través del arte, el deporte, los salones y las plazas, sabiendo de dónde venimos, recordando a quienes estuvieron antes.

Hacé posible la esperanza. Elegí revolución.